En el contexto del Día Mundial de los Cuidados Paliativos -que se conmemora el segundo sábado de octubre- el equipo del programa Cuidados Paliativos Universales (CPU) del CESFAM Dos de Septiembre organizó un encuentro al que fueron invitados usuarios del establecimiento que cumplen la labor de cuidadoras o cuidadores.
A través de este evento, que consideró una capacitación que les permitió adquirir nuevos conocimientos, desarrollar habilidades y aclarar algunas dudas relacionadas con la abnegada función diaria que cumplen al servicio de su ser querido, los participantes recibieron un merecido homenaje de parte del centro de salud familia, expresó Marietta León, enfermera y encargada de los programas Cuidados Paliativos Universales (CPU) y atención domiciliaria.
“Los segundos sábados de cada octubre se está conmemorando el Día Internacional de los Cuidados Paliativos. Entonces, nosotros, aprovechamos esta instancia para celebrarlo y, además, para hacer una capacitación, que es parte de nuestro programa capacitar a los cuidadores. Los cuidados paliativos universales se refieren a personas que no tienen cáncer -porque uno siempre piensa en el cáncer-, sino que son personas que tienen múltiples patologías y que tienen una expectativa de vida no mayor de 1 año”, explicó.
DESTACABLE LABOR
Ana María Poblete y Mirna Illanes fueron 2 de las cuidadoras reconocidas en esta oportunidad. Ambas se han hecho cargo de sus madres -María Alicia Valenzuela y Emelina Illanes, respectivamente- y aunque la que han asumido ha sido una tarea compleja y demandante en muchos aspectos, destacan el contar con el fundamental apoyo de sus familias y del equipo multiprofesional de su CESFAM para llevarla a cabo.
“Es una labor tremenda la que ellos hacen, es una labor inmensa; con amor, con entrega, con dedicación, con paciencia. Solamente agradecer, yo solamente tengo agradecimiento hacia este equipo y, ojalá, como yo decía, haya más gente, que el legado que ellos van a dejar es un lindo legado y que haya más profesionales con vocación”, planteó Poblete.
“El equipo del CESFAM ha sido maravilloso, el doctor, la señora Marietta, las niñitas como les digo yo -para mí son tan jovencitas-, ha sido un apoyo fundamental en todo este proceso, tanto físico como emocionalmente. Es algo que nos llena, nos conforma”, añadió Illanes.
Fue una emotiva actividad, que ayudó a estrechar, aún más, los genuinos lazos humanos que unen a estas más de 30 familias y a los funcionarios del centro de salud, los que han favorecido la entrega de una atención oportuna, cercana y digna a los pacientes que pertenecen al programa.